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Nuestra Visión

EL SUEÑO DE DIOS PARA SU IGLESIA

Bienvenid@...

Estamos muy contentos de que te hayas conectado a nuestra iglesia, y esperamos que te sientas bienvenido(a) en ella. Tú y tu familia son importantes, y nuestro deseo es que puedan experimentar la increíble bondad de Dios en este lugar. Que florezcan en Su gracia y que conecten rápidamente con el corazón de nuestra casa.

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Como iglesia tenemos una meta de parte de Dios que llevar a cabo: que todos puedan descubrir y desarrollar su identidad y propósito en Cristo. Y por eso, todo lo que planeamos y hacemos en este lugar, tiene como objetivo el cumplimiento de esa visión. Por eso nos encantaría conversar contigo, conocerte y guiarte en tus próximos pasos en la fe. Como familia en Cristo tenemos un hermoso equipo de personas que están dispuestas a servirte en lo que necesites.

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Atentamente,

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Cristián Millán & Yarella Jorquera
Pastores Principales de CDP Chile

"Pues yo sé los planes que tengo para ustedes—dice el Señor—. Son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza.

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Jeremías 29:11, NTV

En CDP Chile creemos que todo hombre, mujer, anciano y niño ha nacido por y para un propósito de Dios en esta tierra. Pero lamentablemente el pecado (la maldad y la corrupción que habita todos nosotros), nos impide descubrir y desarrollar ese propósito, hasta que tenemos un encuentro con Jesús y nuestro corazón es completamente restaurado.

 

El plan y anhelo de Dios es que el mundo pueda conocer cuál es "Su buena, agradable y perfecta voluntad", pero eso no sucederá hasta que seamos "renovados en nuestra manera de pensar" (Romanos 12:2) por medio de "un nuevo nacimiento" (Juan 3:5), la Presencia del Espíritu Santo en nuestra vida (1 Corintios 2:11 - Juan 16:13), y el poder transformador de la Palabra de Dios (2 Timoteo 3:16-17).

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Por eso, nuestra visión es acompañar y guiar a cada nuevo creyente y miembro, para que este pueda transformarse en un seguidor, discípulo y líder de excelencia, con la capacidad de inspirar y formar a otros, y con el importante desafío de transferir el Reino de Dios (un legado espiritual, valórico y material) a su entorno, a la iglesia y a las futuras generaciones. Esto lo llevaremos a cabo por medio de cuatro etapas importantes:

I. ALCANZAR

Conectar a las personas con Dios por medio de Jesucristo.

II .CONSOLIDAR

Plantar a las personas en la familia de Dios y Su plan perfecto.

III. DISCIPULAR

Equipar a las personas en el conocimiento y propósito de Dios.

IV. ENVIAR

Transformar el corazón de las personas al de Cristo por medio del Servicio.

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